¿La cruz, un ídolo o un símbolo cristiano?
Hoy, la imagen de la cruz (en sus diversas versiones y materiales) es asociada por muchas personas a un símbolo del cristianismo e incluso atribuyen a ella cierta “capacidad” de protegerlos. Sin embargo, si lo vemos desde el punto de vista de Dios, la cruz es un ídolo abominable. por lo tanto no podemos justificar su uso con la excusa de que es un simple símbolo de la iglesia o un elemento para recordar a Cristo.
La cruz y el mandamiento sobre la idolatría
Primero, es importante confirmar los mandamientos de Dios con respecto de este asunto. ya que si Dios nos manda no tener la cruz como un objeto sagrado, este solo debería ser considerado como un objeto que atenta contra el mandamiento de Dios. Claramente, el segundo de los diez mandamientos, prohibe adorar ídolos.
Éx. 20:4-5 “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás.”
El claro mandamiento de Dios nos ordenó que no hagamos ídolos ni ninguna semejanza o imagen de lo que está en el cielo, en la tierra o debajo de ella ¿Puede ser la cruz una excepción a la palabra “ninguna”?
La cruz es un ídolo
Para comprender en detalle el mandamiento de Dios, debemos confirmar, en la biblia, a qué se refiere Dios con “imagen”.
Lv. 26:1 “No haréis para vosotros ídolos, ni escultura, ni os levantaréis estatua, ni pondréis en vuestra tierra piedra pintada para inclinaros a ella; porque yo soy Jehová vuestro Dios.”
Una escultura, una estatua y una piedra pintada son todas las imágenes que Dios desea que no hagamos. Por lo tanto, es importante que obedezcamos completamente esta palabra. Objetos de madera, metal, yeso o cualquier otro material todos son iguales ante Dios y no permiten ninguna bendición.
Jer. 10:2-5 “Así dijo Jehová: No aprendáis el camino de las naciones, ni de las señales del cielo tengáis temor, aunque las naciones las teman. Porque las costumbres de los pueblos son vanidad; porque leño del bosque cortaron, obra de manos de artífice con buril. Con plata y oro lo adoran; con clavos y martillo lo afirman para que no se mueva. Derechos están como palmera y no hablan; son llevados, porque no pueden andar. No tengáis temor de ellos, porque ni pueden hacer mal, ni para hacer bien tienen poder.”
Is 45:20 “… No tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su ídolo, y los que ruegan a un dios que no salva.”
Tal como detalla la biblia, hoy muchas personas ruegan delante de diversas imágenes consideradas como “sagradas”. Sin embargo, estos objetos deben ser llevados y no pueden hacer mal ni bien. Por eso, aunque muchos cristianos usan la cruz o la llevan en sus autos como un amuleto, esto es vano, conforme al testimonio de los profetas Jeremías e Isaías.
Los que adoran la cruz y los ídolos y el resultado de ellos
Muchas personas podrían decir que no es algo grave si sólo lo tienen y no le atribuyen un significado especial. Pero, aunque insistan no pueden evitar atribuirle un significado especial o de connotación espiritual. Para ellos la advertencia de Dios es muy clara.
Dt 27:15 “Maldito el hombre que hiciere escultura o imagen de fundición, abominación a Jehová, obra de mano de artífice, y la pusiere en oculto
Los que hacen idolatría serán maldecidos por Dios, lejos de ser bendecidos. por lo tanto, no pueden ser los que entren al reino de los cielos.
En esta época, también se cumple una profecía más.
Jer. 2:27-28 “que dicen a un leño: Mi padre eres tú; y a una piedra: Tu me has engendrado. Porque me volvieron la cerviz, y no el rostro, y en el tiempo de su calamidad dicen: Levántate, y líbranos. ¿Y dónde están tus dioses que hiciste para ti? Levántense ellos, a ver si te podrán librar en el tiempo de tu aflicción…”
El pueblo de Israel que vivió en la época del antiguo testamento decía creer en Dios. pero adoraban a los ídolos hechos de madera o piedra, y finalmente fueron maldecidos y destruidos. Lo mismo sucederá en esta época con los que consideran sagrada una cruz de madera, ya que están cometiendo el mismo error que los israelitas en el pasado, olvidar a Dios, mirando los ídolos fabricados con sus propias manos.
La cruz y la historia cristiana
La cruz no había sido erigida en las iglesias durante al menos 3 siglos después del tiempo de Jesús, según el testimonio histórico. Por ejemplo, el Diccionario teológico de Baker’s testifica que:
“El uso público de la cruz fue adoptado por los cristianos como un símbolo en el tiempo de Constantino. Para los primeros cristianos, que tenían a la crucifixión como un hecho lúgubre de común experiencia. no habla peligro de embellecer la cruz por sentimentalismos.”
Baker’s Dictionary of Theology, p. 152
Esto es una muestra de que la cruz es un ídolo que se introdujo en la iglesia después de que esta se secularizó, proceso que comenzó después que el emperador romano Constantino autorizara el cristianismo en 313 d. C.
Dios profetizó sobre la veneración de la cruz como ídolo en la historia de Israel.
Nm. 21:4-6 “…Y habló el pueblo contra Dios y contra Moisés: ¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para que muramos en este desierto? Pues no hay pan ni agua, y nuestra alma tiene fastidio de este pan tan liviano. Y Jehová envió entre el pueblo serpientes ardientes, que mordían al pueblo, y murió mucho pueblo de Israel.”
En el camino del desierto, los israelitas pecaron quejándose contra Dios. Por esto, muchos fueron mordidos por serpientes ardientes y murieron. Después, por su arrepentimiento Dios les mostró la manera de vivir a los que estaban muriendo por la mordedura de las serpientes ardientes.
Nm. 21:7-9 “Entonces el pueblo vino a Moisés y dijo: Hemos pecado por haber hablado contra Jehová, y contra ti; ruega a Jehová que quite de nosotros estas serpientes. Y Moisés oró por el pueblo. Y Jehová dijo a Moisés: Hazte una serpiente ardiente, y ponla sobre una asta; y cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, vivirá. Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre una asta; y cando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía.”
De esta manera, los israelitas podían vivir al mirar la serpiente de bronce hecha por Moisés. Entonces, pensaron que esto ocurría por el poder de la serpiente de bronce en sí. pero no fue por el poder de la serpiente de bronce, sino por las palabras de Dios que dijo: “Cualquiera que mirare a ella, vivirá”.
Por su mal entendimiento de pensar que el objeto los había salvado, la adoraron como un símbolo de salvación hasta la época del rey Ezequías, unos 800 años después de Moisés.
2 R. 18:3-4 “Hizo lo recto ante los ojos de Jehová, conforme a todas las cosas que había hecho David su padre. El quitó los lugares altos, y quebró las imágenes, y cortó los símbolos de Asera, e hizo pedazos la serpiente de bronce que había hecho Moisés, porque hasta entonces le quemaban incienso los hijos de Israel; y la llamó Nehustán.”
La biblia testifica que Ezequías, que quebró todos los ídolos y también hizo pedazos la serpiente de bronce, y la llamó “Nehustán”, fue quien hizo lo correcto delante de los ojos de Dios. Según la nota al pie de página, Nehustán significa “cosa de bronce”, esto nos confirma una vez más que la serpiente de bronce no era más que un ídolo hecho de bronce.
La historia de la serpiente de bronce es una profecía de la obra de la salvación de Jesús que se cumpliría en la cruz.
Jn. 3:14-15 “Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”
Jn. 12:31-33 … Y yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo. Y decía esto dando a entender de qué muerte iba a morir
Jesús al decir que sería levantado como la serpiente de bronce, hizo referencia a su sufrimiento en la cruz. Es por esto que la historia de la serpiente de bronce, era una profecía. Así como los israelitas pudieron vivir mirando la serpiente de bronce en los tiempos de Moisés, nosotros somos salvos por medio del sacrificio de Jesús en la cruz.
Pero, también el hecho de que la serpiente de bronce haya sido adorada durante más de 800 años era una profecía de que las personas atribuirían poder al “objeto cruz” olvidando el sacrificio de Cristo y las palabras de salvación dadas por Él, así como olvidaron que la salvación fue dada por la palabra de Dios.
En los tiempos del nuevo testamento hemos recibido las palabras de salvación “el que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna”, pero este mandamiento ha sido olvidado por los cristianos. Hoy muchos cristianos olvidan que la promesa de salvación está el pan y el vino de la Pascua que Jesús estableció derramando su sangre en la cruz, y en lugar de esto adoran la cruz.
Debemos tener la fe de Ezequías quien, como reformador de los tiempos del Antiguo Testamento quebró la serpiente de bronce llamándola “cosa”, rechacemos la adoración de la cruz que es un ídolo y reconozcamos y obedezcamos los mandamientos de Dios correctamente, siendo el pueblo salvo.